Muchas veces hemos hablado en este blog, de que nuestro compatriotas, aquellos que resultaron ser los pioneros de Aysén, durante su permanencia en Argentina, debieron soportar varias condiciones que no sabemos si se les aplicaba a otros inmigrantes. Hemos dicho que a pesar de que Argentina abrió generosamente las puertas para que ingresaran miles de personas de distintas nacionalidades, nuestros compatriotas, que acudieron a ese llamado por diferentes causas, fueron catalogados como inmigrantes de segunda categoría, no muy diferente de lo que hoy sucede en nuestro país con ciudadanos peruanos, bolivianos, colombianos o haitianos.
Hoy les presento un Certificado de Buena Conducta ,emitido por la policía de Buenos Aires a un ciudadano chileno. Este certificado era obligatorio para los chilenos que pretendían obtener tierras en arrendamiento y para aquellos que debían salir de Argentina por breve tiempo.
Un documento. Una historia.
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